Buenos días,
Habría que ver las estipulaciones del contrato a cerca de duración y penalizaciones en caso de  desistimiento, puesto que al tratarse de un arrendamiento de uso distinto de vivienda el contrato se rige por lo acordado entre las partes.
Si realmente es un problema de imposibilidad de hacer frente a los gastos, en mi opinión, lo mejor sería hablar con el arrendador y demostrarle que es así, que si sigue allí llegará un momento en el que no pueda pagarle y no será por gusto. Entiendo que es mejor un buen acuerdo que tener a alguien que no puede hacer frente al pago de la renta aún queriendo... Tema distinto es que no pueda demostrar que, efectivamente el negocio va mal, si no que no va tan bien como querría a consecuencia de los bares de al lado o cualquier otro motivo. De ser así, lo debió pensar antes de firmar el contrato. El dialogo y el entendimiento es lo mejor en este tipo de casos, siempre partiendo de la base de que lo que manda es el contrato y si alguno se "cierra en banda", habrá que estar a lo estipulado en el mismo.
Saludos