Si el piso está aquilado a tu nombre no, por supuesto, cada uno en su casa mete a quien quiera, otra cosa es si es por habitaciones, un saludo

Efectivamente, estoy de acuerdo con Ramón.

Si lo que has alquilado es una habitación puede hacerlo.

Paula,

Si el piso es del Obispado, seguramente sí. Al menos, en tanto no muestres tu certificado de matrimonio.

En un contrato de alquiler de vivienda -esté o no declarado- no se limita el número de habitantes que lo van a ocupar, ni se exige ningún certificado de consanguinidad. El inquilino mete en su casa (y, si lo desea, en su cama) a quien le viene en gana.

Pero tú hablas, ora de un piso, ora de una habitación de matrimonio, en una residencia de estudiantes.

¡Cuidado! No es lo mismo. Si la patrona alquila habitaciones a estudiantes y les cobra a cada uno su cuota mensual, si entra otro más, parece lógico que sea uno más a pagar, se acueste con quien se acueste.

Distinto es que, entre varias amigas, hayais alquilado un piso y, mensualmente, paguéis la renta completa de una vez . El casero/a no necesita saber como os repartís la cuota entre vosotras, ni con quien se acuesta cada una.

Ramón Ruiz