Si el contrato terminó en junio y ha durado menos de ocho años, ante el silencio de las partes se prorrogó por un nuevo año, por lo que aún le quedan cuatro meses de vigencia. El arrendador puede exigir el pago de las rentas hasta la entrega de las llaves.

También podría negarse a recibirlas antes de junio y arriesgarse en un hipotético pleito a no cobrar las rentas posteriores si el arrendatario hubiera puesto las llaves a su disposición y notificado por medio de notario. La vía de los amigos es incorrecta porque no solo se trata de entregar las llaves sino de resolver el contrato, cosa que solo pueden hacer el arrendador y el arrendatario directamente o debidamente representados. Hasta entonces el arrendador no puede disponer de la vivienda sin arriesgarse a una posterior acción judicial del arrendatario.

Yo me preocuparía. Si no has entregado las llaves y no hay ningun papel en el que conste la renuncia te puede reclamar el pago de las mensualidades.

Mandalé un burofax y si no llegas a acuerdo haz una consignación en el juzgado para que recoja allí las llaves.

Con el burofax, recoja las llaves o no, ya tienes tu prueba de la finalización del contrato.