Es demasiado indefinida la pregunta para poder contestar algo concreto, especialmente porque no se sabe el motivo de las posibles obras. En general se puede afirmar que el arrendatario debe soportar la obra. Si se ve privado temporalmente de su vivienda, puede desistir del contrato o suspenderlo mientras duren las obras. Antes de abandonar la vivienda debe asegurarse de haber recibido del arrendador la comunicación escrita y detallada de las obras, su calificación, el acuerdo u orden que las autoriza y, en su caso, el importe y duración estimados, porque puede ser que la renta se incremente. Como las causas de las obras pueden ser muchas y cada una tener un tratamiento distinto, lo que aconsejo es hacer la consulta cuando se haya recibido la primera comunicación del arrendador.