Las cantidades pagadas el año pasado en concepto de hipoteca se consignan en la casilla 72, con el límite de lo consignado en la casilla 70. Lo que exceda se consigna en la casilla 73, para deducirlo en los próximos 4 años en la casilla 71.

En la casilla 74 se consignan los demás gastos deducibles, entre los que los más comunes son la amortización de la construcción a razón del 3% del mayor de los siguientes valores, el coste de adquisición o valor catastral, sin incluir en ningún caso el valor del suelo, primas de contratos de seguros, tributos como el IBI y gastos de comunidad, siempre que no los pague el arrendatario.

Finalmente, en la casilla 76 se consigna otro importante capítulo, el 50% del rendimiento neto (casilla 75) siempre que el inmueble arrendado sea la vivienda habitual del arrendatario. Esta reducción será del 100% si el arrendatario tuvo en 2008 entre 18 y 35 años y unos ingresos superiores al IPREM, 7.236,60 euros.

Todo esto está perfectamente explicado en la página 20 de la Guía de Renta 2008.