Si entiendo bien el funcionamiento del alquiler con derecho a compra, todas las cantidades abonadas en concepto de alquiler y entrada han de descontarse del precio acordado en el momento de la compra. ¿Cómo puede beneficiar ésto al propietario? Tengo entendido que en Gran Bretaña el alquiler no se descuenta del precio final; el inquilino tiene un contrato de alquiler que le da un derecho de compra en un tiempo determinado y a un precio pactado. Este procedimiento tiene más sentido para que ambas partes salgan beneficiadas, ¿no?